Autor
Luis García-Rey nació en Vigo en 1981 y desarrolla su carrera como periodista en televisión, presentando desde hace más de una década la edición de fin de semana de Deportes Cuatro. Su voz también se puede escuchar por la noche en el Partidazo de COPE. Además, dirige el Máster de Periodismo Deportivo de la Universidad Villanueva. Axel es su primera novela. @luisgarcia4
Sinopsis
Miércoles, 13 de marzo de 2019. El agente de la policía judicial Axel Nash no es capaz de tomarse la vida con calma y, si no hay casos que resolver, se aburre mortalmente. No en vano dejó su Vigo natal para buscar más acción en Madrid. Una mañana recibe la llamada de su nueva compañera, Loor Galván, a la que apenas conoce, pero con la que, sorprendentemente, conecta: Marcos Goya, presentador radiofónico de un programa nocturno, acaba de aparecer en un hotelucho de citas asesinado a cuchilladas y con restos aparentes de haber sido torturado.
Mientras tanto en Vigo, Omar Pombo y su amigo Javier Grande, Jarvis, que, como muchos otros jóvenes de las Rías Baixas, han acabado trapicheando para el narcotráfico, acaban de meterse en un lío descomunal: han perdido un cargamento y las consecuencias son previsibles. Y no son buenas.
Un mundo con personajes demasiado apegados al poder —y a los vicios— de los grandes empresarios, trata de blancas y prostitución, narcotráfico, mucho cine y mucha música en dos tramas perfectamente enlazadas, con giros magistrales y dos protagonistas inolvidables: eso y más es Axel, el debut narrativo del periodista Luis García-Rey.
[Información tomada directamente del ejemplar]
Probablemente estemos ante el inicio de una saga. Axel es la primera novela del periodista deportivo Luis García-Rey, libro que lleva por título el nombre de su protagonista principal, o de uno de sus protagonistas principales porque, en este thriller, serán varios los hilos temporales, varias las localizaciones y, por supuesto, variadísimos los personajes. Dejadme que os cuente.
Axel tiene claramente una estructura bipartita. Dos hilos narrativos que, como suele ser habitual, terminarán por confluir en un punto.
2008 (Preámbulo)
Vigo. María es una joven gallega de diecisiete años que, como todas las jóvenes de su edad, sale de bares con sus amigos. Una noche, después de estar de copas, un amigo se ofrece a llevarla a casa. A la mañana siguiente, María ya no será la misma. No volverá a serlo nunca más.
Lo que ocurre esa noche se irá desgranando poco a poco. Luis García-Rey deja aparcados los acontecimientos de ese fatídico 8 de septiembre de 2008 en el pasado, y los irá sacando a la luz paulatinamente. Al inicio de algunos capítulos que transcurren en el presente de la novela (2019), y a modo de introducción, el lector asiste a pequeños diálogos en los que María va contando lo que sucedió aquella noche a una tercera persona. El lector tendrá que seguir leyendo para componer el puzle.
2019
Madrid. Axel Nash es un policía de mal carácter. Está en ese momento en el que parece que todo el mundo está en su contra. «Necesitaba un buen caso donde volcar su ira». Y ese caso llega. En la habitación de un hotel de mala muerte, regentado por un asiático, y de nombre tan sugerente como Hotel Feelings, uno de esos lugares en los que las habitaciones se contratan por horas, aparece un cadáver. La escena del crimen es dantesca.
«Y la escena era obra de un maníaco. O eso pensaron todos al ver un cuerpo sin vida que yacía de espaldas al espejo del techo sobre un colchón sin sábanas de 2 por 1,90. Un torrente de sangre coagulada, espesa, casi negra, coloreaba la cama y amplificaba la silueta del muerto que, tumbado boca abajo, daba la sensación de ser un hombre alto». [pág. 30]
Un hombre alto y desnudo. Lo más llamativo es que le han seccionado el pene, pero el miembro no aparece por ningún sitio. A priori, se podría pensar que es un asesinato más, uno de esos crímenes que ocupan la página de sucesos por una única jornada. Sin embargo, este crimen no pasará sin pena ni gloria. Y es que la víctima es Marcos Goya, «uno de los periodistas más reputados de este país». Todo apunta a un crimen pasional pero, ¿con quién se citaba Marcos en ese lugar tan cutre? ¿Era un hombre o una mujer? ¿Se trata de una venganza?
Para investigar esta muerte, a Axel le asignan nueva compañera. Lorena Galván, o Loor, como la conocen todos, ha sido trasladada a Madrid desde Toledo. Inicialmente, uno no será santo de devoción del otro pero, donde manda patrón, no manda marinero. No tienen más remedio que aunar fuerzas para esclarecer los hechos. Así que juntos empiezan a tirar de los distintos hilos e irán interrogando a todo aquel que, tanto a nivel profesional como personal, ha tenido trato con la víctima.
************
Vigo. Noa no vive, más bien se diría que arrastra la vida. Lo único que le anima un poco es enfundarse el neopreno, coger la tabla y surfear olas. ¿Qué le ocurre? A ti te lo voy a contar. Solo te diré que ella será protagonista importante de este hilo temporal, y junto a ella, su hermana Iria, una policía implicada en un caso de corrupción política que, por el hecho de ser mujer, tiene que demostrar constantemente que es tan capaz como sus compañeros. Eso, y soportar situaciones machistas y comentarios babosos. Iria vive pendiente de su hermana, tratará de ayudarla en todo lo que puede, sin llegar a entenderla totalmente.
Pero Vigo también será el escenario por el que deambulan Jarvis y Omar, dos camellos que menudean con drogas y se dedican a colocar el material. Ellos serán los intermediarios de los grandes narcos, gente chunga, de gatillo fácil. Así que veremos a estos dos meterse en más de un lío del que les costará salir.
Y este será el planteamiento general, una mise en plat que se verá alterada cuando aparezca otro cadáver. Esta vez en aguas gallegas.
Los grandes tema de la novela serán el sexo, el dinero y el poder. Pero habrá más. En esta historia entran en juego las emociones y las heridas del pasado, los secretos y la venganza. Ya no te cuento más nada.
Qué me ha gustado y qué no me ha gustado de esta novela
Mirad, Luis García-Rey es periodista y conoce bien el mundo de la radio y de la televisión. A través de esta historia, me ha gustado asomarme a ese mundillo de las ondas radiofónicas. En la entrevista que nos concedió el autor (puedes leerla aquí), nos dijo que, independientemente de la competencia, periodistas de un mismo medio, o incluso de medios distintos, suelen llevarse bien. No obstante, en Axel la cosa será bien distinta. Lo que veremos en las redacciones y los estudios de grabación dista mucho de la cordialidad y el compadreo. En estas páginas, habrá mucha zancadilla y mucho puñal por la espalda, mucha alegría por la caída en desgracia de un compañero, mucho profesional que trabaja a destajo y no se le reconoce la labor, y mucho pelota que trepa haciendo gala de una indecorosa ética profesional. Todo este mundo turbio y de malas praxis aporta bastante interés a la novela, porque es inevitable que pensemos hasta qué punto lo que se nos cuenta es real.
La radio y el narcotráfico. Que una parte de la acción transcurra en Vigo y que dos de los personajes sean camellos nos va a permitir conocer cómo se las gastan los que se mueven por esas esferas. También será interesante meter la nariz en esas escenas.
Por otra parte, la trama está bien tejida. No me ha parecido que quedaran flecos sueltos ni lagunas. Resulta curioso ver cómo aquello que, en apariencia es un suceso suelto, en realidad está relacionado con otros acontecimientos. Luis García-Rey se las compone para que todo quede atado, y debidamente explicado.
En cuanto a los personajes, tengo dos preferidos. Loor me ha gustado mucho. Tanto ella como Axel están marcados por su pasado pero, en el caso de ella, su historia aporta un toque de originalidad. Lo que le ocurre a Loor en Toledo es algo que no he leído nunca. Si te paras a pensar en lo que le sucedió, se podría pensar que las consecuencias de sus actos podrían haber derivado en algo distinto pero bueno, a ella la «castigan» con un traslado a Madrid.
A su vez, Jarvis, que para mí representa el «colgao» de toda la vida, me ha hecho mucha gracia. Creo que García-Rey lo define perfectamente. La forma que tiene de hablar, de pensar, de actuar lo convierten en un tipo auténtico, que encaja perfectamente en el entorno en el que se mueve. Os doy más detalles abajo.
Por último, también he disfrutado viendo a los personajes, concretamente a Axel y a Loor, moverse fuera de su ámbito laboral. No todo en esta novela es investigar la muerte de Marcos Goya. Estamos acostumbrados a ver a estos policías literarios con una vida propia, obligaciones domésticas que atender, o momentos de ocio. Así será también con el tándem protagonista de esta novela, a los que veremos en mitad de una cita o un escarceo amoroso.
Y llego ahora a los puntos más polémicos. Bajo mi punto de vista, el texto necesita un pulido. Uno va leyendo y se encuentra con bailes de letras o con falta de concordancia entre pronombres y sustantivos que afean la narración. En algún momento también encontramos que faltan acentos, por ejemplo, en la conjugación de algunos verbos que, dependiendo del tiempo verbal empleado, requieren de tilde o no (enseño - enseñó) o en palabras que, según sean pronombres personales o meros artículos están acentuados (el - él). Son pequeños tropiezos, pequeñas piedrecitas en el zapato que, si bien no afectan en el desarrollo de la acción, no quedan bien en una novela. A mí, no es que me resulte especialmente incómodo encontrarme con estas erratas pero, si lo comento es porque en Axel ocurre con un cierta y relativa frecuencia, y cualquier lector que se acerque a esta novela lo va a advertir.
Personajes
Hablemos un poco más en profundidad de los personajes más principales. Para empezar, Axel es gallego, aunque por su venas también corre sangre americana, de ahí que su apellido suene poco español. Tiene mal carácter. Odia conducir, refunfuña por todo, se muestra constantemente a la defensiva y es un tanto irreverente, pero tiene un punto débil. Bueno, más bien dos. Uno no te lo voy a contar. El otro es su hija Marta, una niña de nueve años, casi tan indomable como su padre. Al menos, es lo que piensan en su colegio, donde la definen como «caprichosa, exagerada, profundamente egoísta, airada, malhumorada,...». Marta es el amor de su vida, la persona por la que siente una losa de la culpabilidad sobre sus espaldas. El trabajo de Axel no entiende de horarios, ni de fines de semana, así que no le puede dedicar mucho tiempo a su hija que, la mayor parte del tiempo está con su tía Gema. De la madre de Marta no te voy a contar nada tampoco.
En cuanto a Loor, cuando llega a Madrid lo hace con peso extra. Algo le ocurrió en Toledo, algo que le ha conducido a la capital de España como si fuera un castigo. Loor no soporta Madrid. Dice que todo está demasiado lejos de todo, cuando ella ha estado siempre acostumbrada a espacios más reducidos. Pero, no tendrá más remedio que adaptarse. De cabello corto, rubio y oxigenado, es un personaje a la que le rondan muchos fantasmas, de ahí que duerma poco y descanse menos. Será muy interesante conocer su historia personal.
Entre Axel y Loor habrá muchísima complicidad. Es una pareja de personajes protagonistas que funcionan bien juntos. Aunque tienen diferentes formas de proceder y encarar su profesión, se amoldan a la perfección. Uno puede llegar a imaginárselos caminando por la calle, llevando a cabo interrogatorios y tratando de esclarecer los hechos. Sus diálogos fluyen. A veces, no hace falta ni que hablen para entenderse.
Iria. Al margen de ser policía también es una apasionada de la música. Tanto que hasta forma parte de un banda llamada The Rockets. Musicalmente, Iria comparte escenario con Omar. La joven vive con cierto resentimiento y, a veces, cuando la murria le puede, necesita el calor de los suyos. Pero es un personaje que se apoya en la obsesión que la posee, en la necesidad de esclarecer algo que sucedió en el pasado y no parará hasta conseguirlo. Para mí será uno de esos personajes que van creciendo con la trama, hasta convertirse en piezas clave.
Omar tiene unos treinta años, un hombre con sueños que se truncaron en el camino. Entusiasmado del fútbol, «llegó a debutar en primera, pero las lesiones le retiraron pronto». Aun así, consiguió ser su propio jefe y dirigir una empresa textil que no es poca cosa. Luego está la música, que no es más que un pasatiempo que le permite ligar con las chicas. Aunque tampoco le hace falta mucho porque es «alto, guapo, desaliñado, con imagen de juguete roto del grunge». Si anda metido en líos de drogas es porque no deja de ser un dinero fácil de ganar. García-Rey estable una relación curiosa entre Iria y Omar. Son amigos, a ambos le unen la música, y pasarán muchas horas juntos. Pero una es policía, y el otro camello.
Jarvis, como dije antes, es muy auténtico. Es de esos tipos que vienen de vuelta de todo, agarrados a la vida con un hilo, malhablados, y derrochando mala hostia pero, en el fondo, no es más que un pobre desgraciado que tiene una incontinencia verbal alucinante. Puede ser un personaje que crispe al lector, como le ocurre a algunos personajes de la novela, pero a mí me ha gustado mucho y hasta me ha parecido divertido, a pesar de ser un despojo social. Me ha resultado un tío que, teniendo en cuenta sus circunstancias personales, tiene una filosofía de vida propia, pero de esa vida gris que a él le ha tocado en desgracia.
Referencias culturales
Axel es hija de su tiempo, una novela contemporánea, que bebe de fuentes actuales o de un pasado reciente. Entre las páginas de este libro vamos a encontrar los gustos de su autor, la música que escucha Luis García-Rey, en forma de estrofas sueltas que se cuelan en la narración. Ha sido divertido ir encontrándolas. También hay mención a series televisivas como, ¿te acuerdas de Remington Steel? Porque, si te acuerdas, tú ya no cumples los treinta.
Estructura y estilo
Axel roza las seiscientas páginas pero se lee con fluidez, gracias a un ritmo apropiado para lo que es un thriller y al equilibrio entre narración y diálogo. Con saltos en el tiempo, la novela está escrita en tercera persona, aunque García-Rey incorpora los pensamientos de Axel en primera persona con relativa frecuencia. El empleo de este recurso me ha gustado, creo que permite al lector conocer con mayor profundidad al personaje, porque no solo vamos a tener la percepción que nos brinda el narrador en tercera persona, sino que será el propio personaje quien nos permita conocer cómo es realmente. Una cosa es lo que hace y otra muy distinta lo que piensa.
Luis García-Rey maneja bien los diálogos entre Axel y Loor. En algunos pasajes son mordaces y están cargados de ironías. Pero, con otros personajes, me han parecido más planos, con pocos matices.
En definitiva, Axel es una novela negra que me ha parecido bastante entretenida. El lector irá tratando de averiguar qué le pasó a María y quién ha sido el asesino de Marcos Goya. Del enredo inicial que nos presenta el autor, García-Rey va saliendo airoso, a medida que se deslía la madeja.
¡Ah!, la clave de todo está en un cepillo de dientes.
[Fuente: Imagen de la cubierta tomada de la web de la editorial]
Puedes adquirirlo aquí:
Apetece este libro. Últimamente estoy encontrando historias ambientadas en Galicia que me atraen mucho. Parece entretenido. Tomo nota.
ResponderEliminarUn beso.
La sinopsis de esta novela me atrajo cuando la vi anunciada en redes sociales. Tu reseña me confirma que la lectura de Axel es atractiva, aunque es una pena lo que comentas en el párrafo que precede a tus impresiones sobre los personajes. Las editoriales deberían de tener un poco más de cuidado con las erratas porque, como bien dices, son piedrecillas que no quedan bien en una novela. Pese a este desliz, me la llevo apuntada, sin duda. Besos.
ResponderEliminar¡Hola! No conocía de nada este libro, pero tiene tantas cosas de las que me suelen gustar en una lectura, que apuntado me lo llevo. Me ha gustado mucho tu reseña, besos :)
ResponderEliminarHola. Estamos en lo de siempre. Si te gusta este esquema bien, pero a mí ya me aburre mucho. Y si encima al texto le falta una vuelta, ya ni me lo planteo. Está claro que en todos los textos va a haber erratas, alguna siempre se escapa pero cuando te das cuenta es porque hay demasiadas y el libro no es lo bastante bueno. Me parece que tiene demasiados clichés para mi gusto. Y demasiado actual. Yo prefiero ahora cosas más desligadas de la realidad.
ResponderEliminarBesos
Estoy de acuerdo. Clichés, erratas, flojo planteamiento, manido estilo. Un saludo
EliminarNo lo conocía y no pinta nada mal. Pero tengo tanto de este género pendiente que por ahora lo voy a dejar pasar. Y se agradecería que las editoriales cuidaran un poquito más sus libros. Últimamente estoy viendo demasiadas erratas y da bastante coraje.
ResponderEliminarBesotes!!!
Buenos días, Marisa.
ResponderEliminarEl tema de la revisión y corrección de textos es una de las cosas que más falta hacen en el panorama editorial del momento. Me enfada mucho comprarme un libro que no se haya corregido.
Por otro lado, esta novela no pinta mal. Tomo nota del autor (no lo conocía, debe ser que no veo la tele :)), pero echaré un vistazo a su trabajo presente y futuro.
Un abrazo, y gracias por tu estupenda reseña!!