Sevilla. Espacio Santa Clara. Casa de los poetas. Los medios de comunicación fueron convocados el pasado día 7 de julio para presentar una nueva obra literaria. Cuando el monarca espera, poemario firmado por Javier Vela, recibe el XI Premio Iberoamericano de Poesía Hermanos Machado. La entrega del premio, convocado por el Instituto de la Cultura y las Artes del Ayuntamiento de Sevilla (ICAS), con la colaboración de la Fundación José Manuel Lara, contó con la asistencia del Delegado de Hábitat Urbano, Cultura y Turismo del Ayuntamiento hispalense, Antonio Muñoz, y con Ignacio Garmendia, editor de la fundación.
Abrió el acto el Delegado de Cultura con unas palabras de bienvenida y de agradecimiento a la Fundación José Manuel Lara por seguir apostando por la poesía, a través de la colección Vandalia. Haciendo alusión a las palabras de Juan Ramón Jiménez, quien en su día afirmó que Sevilla era la capital lírica de España, Muñoz ensalzó la unión entre el Ayuntamiento de la ciudad y la fundación para trabajar en la misma dirección y reforzar la idea del poeta moguereño. Con el deseo de reiterar el compromiso del ayuntamiento con el mundo de la poesía, Antonio Muñoz hizo entrega del diploma a Javier Vela.
Por su parte, Ignacio Garmendia fue el encargado de presentar al ganador. De Javier Vela señaló que la obra del escritor estaba ya presente en la colección Vandalia, a través de su libro Fábula, publicado en 2017 bajo este mismo sello. Según el editor de la Fundación José Manuel Lara, «la trayectoria de Javier es brillante y multifacética». Apuntó que, además de su faceta como creador de poesía, Vela también es traductor y gestor cultural. Recientemente ha fundado la editorial Firmamento, junto a María Alcantarilla. Este nuevo sello editorial lleva en movimiento tan solo unos meses, periodo en el que la editorial ha publicado tres títulos, -se anuncian nuevas publicaciones de cara a septiembre-, entre los que Garmendia destaca la obra de la holandesa Neel Doof, desconocida para la mayoría, y su obra Días de hambre y miseria, primera entrega de la «trilogía del hambre», un retrato conmovedor de la vida proletaria europea de finales del siglo XIX, y cuya traducción ha llevado a cabo el propio Javier.
Ganador de diversos premios, entre los que figuran el Premio Adonais y el Premio de la Crítica de Madrid, la producción de Javier Vela no solo destaca por sus poemarios. El autor también ha ahondado en la narrativa y cuenta con tres publicaciones de carácter híbrido bajo los títulos Pequeñas sediciones (2017), compuesto de microrrelatos; Libro de las máscaras (2019), conjunto de aforismos y mistificaciones de tradición apócrifa; y el más reciente, publicado con Pre-textos, Revelaciones de la maestra del arco (2021), a mitad de camino entre la narrativa y el ensayo de ficción. «Estos últimos libros dicen mucho de la inquietud de Javier Vela como creador», señaló Garmendia.
Con respecto a la obra ganadora, Cuando el monarca espera es un volumen compuesto por un único poema, dividido en tres partes: El poeta escribe entre líneas, ¿Quiénes son, los poetas? y El poeta insiste en la fabulación. Diversos fragmentos son de inspiración autobiográfica. El editor de la fundación afirmó que el libro es una extensa reflexión sobre el oficio de poeta, con versículos de corte aforístico, en los que el lector puede encontrar múltiples referencias a todos esos escritores y creadores que han marcado al autor. El jurado, compuesto por el delegado de Hábitat Urbano, Cultura y Turismo del Ayuntamiento de Sevilla, Antonio Muñoz, en calidad de presidente; y los poetas, escritores y especialistas Jacobo Cortines, Javier Salvago, Abelardo Linares e Ignacio Garmendia, como vocales; y Carmen Hernández, del Servicio de Gestión Administrativa, Economía y Cultural del ICAS, como secretaria, destacó que Cuando el monarca espera es un libro «lleno de imágenes poderosas, abstractas, de fondo hermético o metafísico, que inquiere en el oficio y la condición de poeta, la identidad, la tensión entre el silencio y la palabra creadora».
El libro abre y cierra con dos citas muy reveladoras. La primera de ella corresponde a Emily Dickinson -«Di toda la verdad, más dila al sesgo»-, que hace alusión a una manera elíptica o indirecta de escribir. La segunda pertenece a León Felipe, -«La poesía se apoya en la biografía. Es biografía hasta que se hace destino»-, sumamente sugerente a juicio de Garmendia, quien terminó su intervención afirmando que Javier Vela «funda un bosque de fábulas, con el que, más que reflejar la realidad, lo que pretende es crear una nueva».´
Acto seguido, tomó la palabra el ganador del premio.
Sobre el título del poemario, Javier Vela explicó que la imagen del monarca es una figuración simbólica del destino, contra el que el poeta, o cualquier persona mínimamente crítica, debe rebelarse. «Esas circunstancias diarias a las que llamamos destino, en definitiva se materializan en cosas muy banales y muy cotidianas». Añadió que el tiempo se paraliza cuando dejamos de mirar al lugar en el que nos dirigimos, cuando dejamos de mirar ese mandato que el destino nos impone. Rebelarse contra el destino, es rebelarse contra la figura del poder y, por tanto, contra el monarca, «ese antagonista del creador». El creador, y cualquier persona, debe establecer su propia forma de vida, rebelarse contra las circunstancias diarias y ampliar la escala de la realidad. «La poesía, y cualquier vía de creación artística, permite establecer caminos paralelos desde el canon o contra el canon, abril una vía de escape contra lo impuesto», afirmó el autor que, a continuación, nos leyó un fragmento del libro.
El Premio Iberoamericano de Poesía Hermanos Machado ha recibido en esta edición un total de 540 manuscritos. Con una dotación de 4.000 €, el volumen ya está disponible en librerías.
Gracias por esta estupenda crónica. NO conocía al autor. Pinta bastante bien su novela.
ResponderEliminarBesotes!!!