Año:2020
Nacionalidad: EE.UU
Director: Kenneth Branagh
Reparto: Ferdia Shaw, Lara McDonnell, Josh Gad, Tamara Smart, Nonso Anozie, Judi Dench, Nikesh Patel, Adrian Scarborough, Colin Farrell, Joshua McGuire, Michael Abubakar, Taylor James, Jake Davies, Michael Rouse, Racheal Ofori, Simone Kirby, Joe O'Grady, Finian Duff Lennon, Grace Fincham, Toby Eden, Gerard Horan, Charlie Cameron, Ben Goffe, Conor MacNeill, Arian Nik, Molly Harris, Sally Messham, William Moseley, India Lewis, Hamish McColl, Adam Basil, Michael Peluso, Harry Lister Smith, Jimmy Yuill
Género: Fantasía.
Sinopsis: Artemis Fowl, un joven criminal irlandés, rapta a Holly Short, un hada, con la intención de pedir un rescate que le permita salvar a su padre. Una vez logra cumplir sus intenciones, se embarca en una aventura que le llevará a luchar contra el maléfico hada Opal Koboi. Adaptación del libro de Eoin Colfer.
En realidad, la culpa es mía. Si nunca me han atraído las novelas (ni las películas) de Harry Potter, si la fantasía es un género al que me asomo de higos a brevas, si el argumento me decía poco, ¿para qué me meto? En mi defensa, esgrimo tres nombres: Kenneth Branagh, Colin Farrell y Judi Dench. Pero ni así, el resbalón ha sido apoteósico.
La plataforma Disney+ ofrece en este confinamiento un estreno en exclusiva. Ya que los cines estaban cerrados y esta, al parecer, millonaria película se había quedado en el limbo del coronavirus, decidieron colgarla. Visto lo visto, casi que les doy las gracias porque, aunque no acostumbro a ver el género en pantalla grande, la tentación de los tres hombres mencionados era muy grande, y lo mismo, me podrían haber convencido para ir a verla en sala. De haberlo hecho, me hubiera dado de cabezazos al salir. Y es que, esta película me ha provocado una terrible preocupación. ¿Será que el confinamiento ha reducido mis neuronas a la mínima expresión? ¿Será que el aislamiento social ha apagado mis luces? Con la angustia de la incertidumbre, me lancé a buscar otras opiniones por la red y ¡ahí estaba! No era yo. Era ella. Artemis Fowl tiene un clarísimo problema de guion.
Basada en la saga homónima de Eoin Colfer, que no he leído, Artemis Fowl nos narra la aventura a la que tendrá que enfrentarse un niño de doce años para salvar a su padre. El empresario Artemis Fowl (Colin Farrell), alrededor de cuyos negocios existe un aura de misterio, es buscado por la justicia, acusado de perpetrar una serie de robos. Mientras una legión de reporteros campa en las inmediaciones de la mansión de los Fowl, Mulch Diggums es detenido como colaborador. ¿Quién es este personaje? Lo sabremos más tarde. Con la idea de interrogarlo, el MI6 lo lleva a un enclave en alta mar y allí narrará toda la historia. Será él quien nos cuente cómo el empresario fue secuestrado y cómo su hijo recibirá una llamada del secuestrador, exigiéndole la entrega de un objeto valiosísimo, a cambio de la vida del padre. Ese objeto es el Aculos, un artilugio mágico que hay que proteger porque si cae en manos perversas puede ser un gran peligro para la humanidad. ¿Y de dónde procede este curioso objeto? Pues nada más y nada menos que del mundo de las hadas, de donde fue sustraído hace tiempo. Y es que, en Artemis Fowl el mundo real se mezcla con el mundo de la fantasía, a través de Ciudad Refugio, un universo situado bajo tierra, en la que hay toda una sociedad estructurada jerárquicamente, con hadas, duendes, elfos, trolls, goblins,... Cada especie ocupa un rol determinado y, como en todo mundo, hay entes buenos y otros malvados.
Pues bien, Artemis hijo contará con la ayuda de Butler, un especie de mayordomo-guardaespaldas, con unos impactantes ojos azules que, sinceramente, dan miedo. A su vez, tendrá a una compañera de aventuras, la agente Holly Short, un hada aquejada de un drama personal, que constituirá una subtrama en la película. El pequeño Artemis conocerá la verdadera identidad de su padre, se enfrentará al enemigo y liberará a su padre en, un desenlace que lo deja todo en el aire. Pero todo. Es decir, que habrá segundas partes.
Como decía antes, el guion es un despropósito. Durante toda la proyección tenía que ir avanzando y retrocediendo la película porque no conseguía enterarme de lo que estaba sucediendo. Me costaba muchísimo seguir el hilo de la narración, saber quién era quién, y qué es lo que se proponían. Creo que no está bien contada y seguir el curso de los hechos se convierte en un camino enfangado, en el que te quedas atrapado. Un obstáculo de esas magnitudes impide que te enganches a la historia y, en mi caso, llegó un momento en que dejó de importarme si el hijo salvaba al padre o el padre sucumbía en manos del mal. Además se recurre al camino fácil. El niño tiene que enfrentarse a algún que otro acertijo y en cuestión de segundos da con el resultado. Vale, que la película nos lo presenta como un súper dotado pero es que, la escasa complicación otorga poco realismo al asunto. Y las relaciones de confianza entre el niño y el hada se forjan con una rapidez inusitada.
A esto se le une la aparición de un personaje que no pinta absolutamente nada. Juliet es la sobrina de Butler, una niña experta en un tipo de artes marciales, cuyo papel no aporta nada pero que nada, vamos. Aparece en tres escenas y poco más.
Y ya, por último, el desenlace. Justo ahí se me quedó cara de póker porque, precisamente, lo más interesante, el enfrentamiento entre el bien y el mal lo obvian. El villano de esta historia se convierte en un completo desconocido, del que ni siquiera nos explican sus motivaciones, más allá de una justificación somera, basada en la venganza. Imagino que las piezas irán encajando en las posteriores secuelas, lo cual no me ha hecho ni pizca de gracia.
En cuanto a los personajes, Artemis hijo es el auténtico protagonista de esta historia. Es un niño huérfano de madre y que sufre las constantes ausencias de su padre, sin que él sepa a qué se dedica exactamente su progenitor. Es un niño muy inteligente, un tanto inadaptado, al que no le gusta el colegio porque, en realidad, no lo entienden. Y aunque os esté contando todo esto, verdaderamente, el personaje está poco definido. No se profundiza en su pasado y se pasa de puntillas por sus dramas. Su transformación en salvador del padre pasa por vestirse un traje y colocarse unas gafas oscuras, a lo Men in Black en miniatura. Interpretado por Ferdia Shaw, su personaje me cae tremendamente mal.
En cuanto al padre, reza como un enigmático coleccionista de antigüedades y rarezas. Viaja constantemente y apenas tiene tiempo para dedicarle a su hijo, lo cual le pesa mucho. En realidad, tiene una misión importantísima y tiene que sacrificar la parte familiar. Del personaje tampoco se cuenta gran cosa, ni siquiera cómo llegó a convertirse en lo que es. Interpretado por Colin Farrell, está bastante mal aprovechado. Lo mismo ocurre con Judi Dench, a la que muchos espectadores la ven poco apropiada para interpretar a la comandante Root del país de las hadas. A mí, sinceramente, teniendo en cuenta otros aspectos de la película, es lo que menos me ha molestado.
Sin duda, lo más destacable de Artemis Fowl es la parte técnica. Todos los efectos especiales están muy logrados, salvo uno, que afecta a Mulch Diggums, y del que mejor no comento nada. La fotografía es espectacular, los paisajes tienen un colores realmente vivos, mostrando los milenarios acantilados de Irlanda, escenario de esta película. Y en conjunción, una banda sonora con toques celtas, que para mí es una delicia.
Poco más puedo decir. No me ha gustado Artemis Fowl. Cierto es que tiene buen arranque, pero se va desinflando con el paso de los minutos, hasta llegar a aburrir. Obviamente, la película está dirigida a un público mucho más joven que yo. Sin embargo, no creo que los jóvenes le den un aprobado. Para los más pequeños no hay problema, porque al ser tan visual, estarán muy entretenidos, aunque no comprendan totalmente la trama. Me parece que en esta película Kenneth Branagh patina y resbala.
La plataforma Disney+ ofrece en este confinamiento un estreno en exclusiva. Ya que los cines estaban cerrados y esta, al parecer, millonaria película se había quedado en el limbo del coronavirus, decidieron colgarla. Visto lo visto, casi que les doy las gracias porque, aunque no acostumbro a ver el género en pantalla grande, la tentación de los tres hombres mencionados era muy grande, y lo mismo, me podrían haber convencido para ir a verla en sala. De haberlo hecho, me hubiera dado de cabezazos al salir. Y es que, esta película me ha provocado una terrible preocupación. ¿Será que el confinamiento ha reducido mis neuronas a la mínima expresión? ¿Será que el aislamiento social ha apagado mis luces? Con la angustia de la incertidumbre, me lancé a buscar otras opiniones por la red y ¡ahí estaba! No era yo. Era ella. Artemis Fowl tiene un clarísimo problema de guion.
Basada en la saga homónima de Eoin Colfer, que no he leído, Artemis Fowl nos narra la aventura a la que tendrá que enfrentarse un niño de doce años para salvar a su padre. El empresario Artemis Fowl (Colin Farrell), alrededor de cuyos negocios existe un aura de misterio, es buscado por la justicia, acusado de perpetrar una serie de robos. Mientras una legión de reporteros campa en las inmediaciones de la mansión de los Fowl, Mulch Diggums es detenido como colaborador. ¿Quién es este personaje? Lo sabremos más tarde. Con la idea de interrogarlo, el MI6 lo lleva a un enclave en alta mar y allí narrará toda la historia. Será él quien nos cuente cómo el empresario fue secuestrado y cómo su hijo recibirá una llamada del secuestrador, exigiéndole la entrega de un objeto valiosísimo, a cambio de la vida del padre. Ese objeto es el Aculos, un artilugio mágico que hay que proteger porque si cae en manos perversas puede ser un gran peligro para la humanidad. ¿Y de dónde procede este curioso objeto? Pues nada más y nada menos que del mundo de las hadas, de donde fue sustraído hace tiempo. Y es que, en Artemis Fowl el mundo real se mezcla con el mundo de la fantasía, a través de Ciudad Refugio, un universo situado bajo tierra, en la que hay toda una sociedad estructurada jerárquicamente, con hadas, duendes, elfos, trolls, goblins,... Cada especie ocupa un rol determinado y, como en todo mundo, hay entes buenos y otros malvados.
Pues bien, Artemis hijo contará con la ayuda de Butler, un especie de mayordomo-guardaespaldas, con unos impactantes ojos azules que, sinceramente, dan miedo. A su vez, tendrá a una compañera de aventuras, la agente Holly Short, un hada aquejada de un drama personal, que constituirá una subtrama en la película. El pequeño Artemis conocerá la verdadera identidad de su padre, se enfrentará al enemigo y liberará a su padre en, un desenlace que lo deja todo en el aire. Pero todo. Es decir, que habrá segundas partes.
Como decía antes, el guion es un despropósito. Durante toda la proyección tenía que ir avanzando y retrocediendo la película porque no conseguía enterarme de lo que estaba sucediendo. Me costaba muchísimo seguir el hilo de la narración, saber quién era quién, y qué es lo que se proponían. Creo que no está bien contada y seguir el curso de los hechos se convierte en un camino enfangado, en el que te quedas atrapado. Un obstáculo de esas magnitudes impide que te enganches a la historia y, en mi caso, llegó un momento en que dejó de importarme si el hijo salvaba al padre o el padre sucumbía en manos del mal. Además se recurre al camino fácil. El niño tiene que enfrentarse a algún que otro acertijo y en cuestión de segundos da con el resultado. Vale, que la película nos lo presenta como un súper dotado pero es que, la escasa complicación otorga poco realismo al asunto. Y las relaciones de confianza entre el niño y el hada se forjan con una rapidez inusitada.
A esto se le une la aparición de un personaje que no pinta absolutamente nada. Juliet es la sobrina de Butler, una niña experta en un tipo de artes marciales, cuyo papel no aporta nada pero que nada, vamos. Aparece en tres escenas y poco más.
Y ya, por último, el desenlace. Justo ahí se me quedó cara de póker porque, precisamente, lo más interesante, el enfrentamiento entre el bien y el mal lo obvian. El villano de esta historia se convierte en un completo desconocido, del que ni siquiera nos explican sus motivaciones, más allá de una justificación somera, basada en la venganza. Imagino que las piezas irán encajando en las posteriores secuelas, lo cual no me ha hecho ni pizca de gracia.
En cuanto a los personajes, Artemis hijo es el auténtico protagonista de esta historia. Es un niño huérfano de madre y que sufre las constantes ausencias de su padre, sin que él sepa a qué se dedica exactamente su progenitor. Es un niño muy inteligente, un tanto inadaptado, al que no le gusta el colegio porque, en realidad, no lo entienden. Y aunque os esté contando todo esto, verdaderamente, el personaje está poco definido. No se profundiza en su pasado y se pasa de puntillas por sus dramas. Su transformación en salvador del padre pasa por vestirse un traje y colocarse unas gafas oscuras, a lo Men in Black en miniatura. Interpretado por Ferdia Shaw, su personaje me cae tremendamente mal.
En cuanto al padre, reza como un enigmático coleccionista de antigüedades y rarezas. Viaja constantemente y apenas tiene tiempo para dedicarle a su hijo, lo cual le pesa mucho. En realidad, tiene una misión importantísima y tiene que sacrificar la parte familiar. Del personaje tampoco se cuenta gran cosa, ni siquiera cómo llegó a convertirse en lo que es. Interpretado por Colin Farrell, está bastante mal aprovechado. Lo mismo ocurre con Judi Dench, a la que muchos espectadores la ven poco apropiada para interpretar a la comandante Root del país de las hadas. A mí, sinceramente, teniendo en cuenta otros aspectos de la película, es lo que menos me ha molestado.
Sin duda, lo más destacable de Artemis Fowl es la parte técnica. Todos los efectos especiales están muy logrados, salvo uno, que afecta a Mulch Diggums, y del que mejor no comento nada. La fotografía es espectacular, los paisajes tienen un colores realmente vivos, mostrando los milenarios acantilados de Irlanda, escenario de esta película. Y en conjunción, una banda sonora con toques celtas, que para mí es una delicia.
Poco más puedo decir. No me ha gustado Artemis Fowl. Cierto es que tiene buen arranque, pero se va desinflando con el paso de los minutos, hasta llegar a aburrir. Obviamente, la película está dirigida a un público mucho más joven que yo. Sin embargo, no creo que los jóvenes le den un aprobado. Para los más pequeños no hay problema, porque al ser tan visual, estarán muy entretenidos, aunque no comprendan totalmente la trama. Me parece que en esta película Kenneth Branagh patina y resbala.
Tráiler:
¡Hola! Menudo chasco te has llevado con esta película. Yo leí la saga de libros cuando era bastante pequeña y me pareció bastante entretenida, tampoco nada del otro mundo, así que cuando anunciaron la película me entró bastante curiosidad por ver qué tal. Sin embargo, todas las opiniones que he leído al respecto la dejan bastante mal y hablan de que el guion es bastante pobre, así que no sé si finalmente me animaré a verla o no, sabiendo ya de entrada que seguramente me llevaré una decepción.
ResponderEliminar¡Nos leemos!
No te flageles. El trío protagonista es de los que tientan a cualquiera y el que te la cuelguen para verla en casa tranquilamente, también hace mucho. Como tú, no he leído a Harry Potter más allá del primer libro. Mi hijo tenía por entonces catorce años y me insistió tanto y el libro tenía tanta fama, que lo leí. Desde luego fue el último. Ahí terminó todo mi contacto con Harry Potter.
ResponderEliminarComo a ti, no me atrae demasiado la fantasía como género y encima tampoco me atrae la literatura o el cine juvenil. Vamos que no me acerco a esta película ni con escafandra.
Un beso.
No no no, esta no me va.Tu decepción es contagiosa 😅💋
ResponderEliminarHola, Marisa.
ResponderEliminarDisney no parece encontrar el rumbo con sus nuevas producciones lo que provoca un bucle de secuelas (Toy Story, Cars, etc) al parecer infinitas. Esta nueva producción que reseñas hoy, ya tenía mala pinta de por sí. Quizás también hubiera picado el anzuelo si se hubiera estrenado en cines. Tampoco me llama la atención la secuela o remake que viene de Mulan aunque llenará los cines si el COVID no lo impide.
Un beso.
Ya el argumento no me ha llamado mucho y viendo tu opinión, queda descartada completamente.
ResponderEliminarBesotes!!!
Hola.
ResponderEliminarEl género fantástico no me suele gustar ni en la literatura ni en el cine, así que, teniendo en cuenta lo que nos comentas de esta película la voy a dejar pasar.
Un saludo.
Pues le tengo muchas ganas pero veo que no es para tanto, que pena 😓
ResponderEliminarBesos y gracias por la crítica.
Hola Marisa, aunque el género fantástico me gusta tanto en libros como en cine, esta serie no se porque no me atrajo en ningún momento, no voy a decir que no la veré nunca jamás porque si la echan en la tele y estoy tirada en el sofá igual cae, pero que no voy a correr a verla eso desde luego, y mira que hay varios actores que me llaman como Judi Desch, pero ¡Que se le va a hacer!. No se puede acertar siempre. Besinos.
ResponderEliminar¡Hola Marisa!
ResponderEliminarMenos mal que no la viste en el cine y te ahorraste ese cabezaso... a mi no me llama la atención esta película y después de leer tu reseña menos.
Gracias por compartirnos tu opinión.
Un beso ♥
Trailers llamativos que esconden películas mediocres, empieza a convertirse en una moda. Pero no sé por qué, al ver que la reseñabas sentí cierta esperanza, pero veo que no es así. Una pena. Me gusta el género fantástico, pero contadas las obras que de verdad me convencen.
ResponderEliminarFeliz finde ;)
¡Hola, Marisa!
ResponderEliminarPues una película menos que ver... :)
Lástima que te llevaste tremendo chasco con ella, la verdad es que, si solo la parte técnica es la que se salva, definitivamente estamos frente a una película mediocre y ni por Colin Farrell haría el sacrificio de verla :)) :)) :))
Un besote.
¡Hola Marisa!
ResponderEliminarLa verdad es que ya con solo ver el título no me estaba llamando la atención, menos cuando vi el trailer pero a medida que leía tus palabras creo que hice bien en no verla.
Si bien es triste que le quite la oportunidad pero no quiero sentir que perdí tiempo para llevarme un engaño.
Siento mucho que no te haya gustado.
¡Un abrazo y un beso!