Editorial: Aguilar.
Fecha publicación: septiembre, 2017.
Precio: 15,90 €
Género: Humor.
Nº Páginas: 224
Encuadernación: Flexibook con solapas.
ISBN: 9788403521278
[Disponible en eBook;
puedes empezar a leer aquí]
Fecha publicación: septiembre, 2017.
Precio: 15,90 €
Género: Humor.
Nº Páginas: 224
Encuadernación: Flexibook con solapas.
ISBN: 9788403521278
[Disponible en eBook;
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Autor
Fernando Fabiani. Sevilla 1975. Soy licenciado en Medicina y Cirugía por la Universidad de Sevilla y especialista en Medicina Familiar y Comunitaria. Trabajé en urgencias hospitalarias y desde hace 13 años lo hago en un centro de salud. Subido a las tablas de los escenarios desde hace 25 años, a partir de 2003 me hace cargo de la dirección artística de la compañía Los Síndrome y en 2017 dirijo a Manu Sánchez. Experto en coaching. Apasionado de la docencia y la comunicación, imparto cursos de cómo hacer presentaciones creativas y participo en congresos y eventos de ciencia y comunicación. Hago divulgación en redes y allí donde me dejen. Colaboro en la Cadena SER (Hoy por Hoy Sevilla) y Televisión Españols (Saber Vivir). Convencido del poder del humor como herramienta comunicativa. He publicado Vengo sin cita (Aguilar, 2016) y Vengo de urgencias (Aguilar, 2018). Amante del chocolate negro. Y de la vida. ¿Cambiamos el mundo?
Sinopsis
«¿Te puedo hablar claro?» es a la relación médico paciente
lo que «tenemos que hablar» a las relaciones de pareja. No presagia nada bueno.
Es una de esas preguntas que los médicos nunca deberíamos hacer en una
consulta. Igual que otras como «¿y eso cómo ha llegado a ese sitio? », «¿es
usted la mujer o la madre? » o «¿para qué sirve un piercing ahí?».
«¿Te puedo hablar claro?» es una pregunta necesaria antes de
que abras el libro. Porque no trae buenas noticias. Ojear estas palabras puede
ser ya un punto de no retorno. ¿Estás preparado para abrirlo? Puedes dejarlo
cerrado y seguir siendo feliz creyendo en los cortes de digestión, evitando
andar descalzo para no resfriarte, echando la cabeza para atrás cuando sangras
por la nariz o pensando que si algo te pica es que está sanando. O por el
contrario, puedes atreverte a leer estas páginas.
Pero, ¿te puedo hablar claro?, este es el libro que tu madre
no quiere que leas porque va a tirar por tierra muchos de sus grandes dogmas
sobre la salud; y su lectura puede acarrearte acaloradas discusiones con amigos
e incluso puede hacer que te expulsen del grupo de wasap de padres del
colegio...
Tras el éxito de Vengo sin Cita y Vengo de Urgencias, vuelve
Fernando Fabiani (@FernandoFabiani), médico de familia, decidido a hablar claro
a los pacientes. Y lo hace más directo que nunca y dispuesto a no dejar mito
con cabeza utilizando para ello una herramienta infalible, el humor.
Abre este libro y... ¡que no te cuenten mitos!
Pues parece que ya ha llegado el fresquito, ¿eh? Y claro, nos pilla desprevenidos, con sandalias de verano y sin sacar los jerseys. Esos que tienes metidos en fundas al vacío en el canapé de la cama, que cuando sacas la ropa de ahí, está hecha un higo y a ver quién es el guap@ que quita tanta arruga. Pero abrígate hombre, abrígate que vas a coger frío y te vas a resfriar. Ya sabes que, como no te cuides los catarros desde el primer momento, luego se te bajan al pecho y puedes pillar un principio de neumonía. Y en ese caso, solo hay dos caminos, o te hinchas a pastillas, alternando los antitérmicos bajo un férreo control horario o, en última instancia, te tienen que dar un pinchazo porque si no, no se te quita. Que yo creo que, a la larga, una buena inyección es lo mejor porque, con tanta pastilla, tanta pastilla, al final los medicamentos te dejan de hacer efecto. De todos modos, te aconsejo que te tomes todas las mañanas un botecito de esos que venden en los supermercados. Es como un batido riquísimo, que te ayuda cuando se bajan las defensas. Porque ya lo dicen las madres, más vale prevenir que curar. Y en esto de la prevención, es importante que sigas una serie de pautas. A saber, ni se te ocurra beber leche que ya no eres un bebé. Eso sí, tu zumito natural que no te falte en el desayuno. Aunque puestos a beber, no te olvides de tus dos litros de agua diarios. En las comidas principales, un buen vasito de vino es buenísimo para lo que tú tienes. Y si te sienta mal, pues ya te tomas luego un protector de estómago. En fin, que te cuides mucho...
Sí, cuídate mucho pero sin milongas. La sabiduría popular está llena de creencias que hemos ido heredando de padres a hijos. ¿A quién no le ha dicho su madre que una herida estaba curando porque nos picaba? Seguro que todos hemos escuchado eso alguna vez. Incluso se lo seguimos diciendo a los hijos. En cada casa, siempre ha habido un vademecum casero para todo, pero no todo lo que hemos escuchado desde pequeños es verdad. Así que, después de Vengo sin cita y Vengo de urgencias, dos volúmenes con los que me lo pasé tremendamente bien, Fernando Fabiani regresa con ¿Te puedo hablar claro?, un libro que recoge una selección de muchos mitos que inundan el sector sanitario, y que han sido empleados por nuestras bisabuelas, nuestras abuelas y nuestras madres... Te garantizo que, con solo leer el índice del libro, te vas a sentir identificado y vas a empezar a reírte.
Lo interesante de este libro no es solo que desmiente ciertas creencias sino que, Fabiani nos explica de dónde proceden, pues asegura que, detrás de cada mito, hay algo de verdad. A su vez, nos da algunos consejos (de los buenos) que nos pueden venir muy bien para esas dolencias habituales que solemos padecer, y nos aclara algunas cosas en las que todos hemos creído a pie juntillas. Porque dime tú, si después de un día de piscina, acabas con los ojos muy colorados, ¿a qué crees que se debe? Seguro que me contestas a que el agua tiene mucho cloro. Pues va a ser que no, fíjate tú.
Por si esto fuera poco, también mete baza en la profesión sanitaria, alegando que, son los mismos profesionales de la medicina -entre los que él mismo se incluye- los que favorecen a la propagación de este tipo de mitos. En estas páginas, Fabiani desvela algunas cuestiones que, sinceramente, me han dejado muy sorprendida, y hay que reconocerle que ha hecho un ejercicio de honestidad, contándonos con sencillez, lo que podemos esperar o no de nuestro médico de familia, una persona a la que recurrimos para curar nuestros males, pero en la que también queremos encontrar ese apoyo moral que tanto necesitamos cuando nos encontramos mal. Me pareció muy acertado todo lo que Fabiani comentó en la entrevista (puedes leerla aquí). Realmente, hay una parte de empatía en la medicina que tiene un papel fundamental en nuestro proceso de curación.
Como ves, en ¿Te puedo hablar claro? hay capítulos realmente interesantes, en los que el autor nos cuenta cómo se producen los procesos febriles, cómo usar un baño público sin la angustia de que vamos a pillar allí toda clase de infecciones, la verdadera efectividad de los mucolíticos y lo innecesario que resulta comprarse todo tipo de producto que anuncian en la tele. ¿Te puedo hablar claro? es una guía con consejos básicos, escritas con el humor chispeante y fresco al que nos tiene acostumbrados Fernando Fabiani. Y como valor añadido, cuenta con las ilustraciones de David GJ, un complemento perfecto para todo lo que el autor quiere contarnos.
En definitiva, que si quieres pasar un buen rato y encima aprender un poco sobre algunos temas médicos, te aconsejo que le eches un ojo a ¿Te puedo hablar claro? Ya verás lo mucho que te ríes y lo mucho que aprendes.
¡Que no te cuenten mitos!
[Fuente: Imagen de la cubierta tomada de la web de la editorial]
Puedes adquirirlo aquí:
Si se cruza puede que me anime. Pero así de primeras no es un tipo de lectura que suela buscar.
ResponderEliminarBesotes!!!
Con lo hipocondriaca que soy 😂😂😂
ResponderEliminarSeguro que paso un buen rato leyéndolo.
Besitos 💋💋💋
Hola!! Pues aunque me parece interesante y divertido porque si no el tema puede ser muy tedioso, no lo veo para mí. Es que el tema sanitario no me gusta para el tiempo de lectura. A ver si van cayendo mitos, sí, que ya es hora.
ResponderEliminarBesos
La verdad es que no suelo animarme con este tipo de lecturas, no las busco pero si se me cruza esta la leeré.
ResponderEliminarBesos.
Teniendo en cuenta la cantidad de medicamentos que se compran y que acaban en la basura, un libro como este es muy necesario. Y si además tiene sentido del humor, mucho mejor. Besos.
ResponderEliminarUn poco de humor viene bien, y si es en temas sanitario, más todavía. Lo leería, aunque sin darle preferencia sobre otras lecturas pendientes. Besos.
ResponderEliminarUffff, este no me llama nada y sin tiempo que ando, lo dejo pasar fijo.
ResponderEliminarBesos