Quedan pocas horas para el fin de las vacaciones y para que el blog se reactive de nuevo de forma diaria, pero aún me quedan algunas entrevistas y actos pendientes de publicar y que se produjeron entre los meses de junio y julio. Hoy, y antes de que pase más el tiempo, quiero hablaros de un estupendo acto literario que tuvo lugar el pasado 7 de junio y que nos permitió conocer una nueva novela.
El antiguo Pabellón de Marruecos de la Expo'92 acoge actualmente la Fundación Tres Culturas, una institución que nace al amparo de un acuerdo entre el Reino de Marruecos y la Junta de Andalucía, para constituir un foro basado en los principios de la paz, el diálogo y la tolerancia para promover el encuentro entre los pueblos y las diversas culturas del Mediterráneo. Allí tuvo lugar en el mes de junio la presentación de la nueva novela de Javier Valenzuela, Limones negros, editada recientemente por Anantes Editorial.
En un lugar tan bonito como ese edificio se congregó un numeroso público, entre los que figuraban varios clubes de lectura, para arropar la presentación de esta nuevo libro del autor granadino, escritor y periodista desde hace más de 30 años, siendo corresponsal de El País en Beirut, en Rabal, París, Washington. Limones negros es su décimo libro pero su segunda novela con el mismo protagonista, Sepúlveda, y supone el regreso de Javier Valenzuela a Tánger, una ciudad que se definió como crápula y densa.
Rocío Rojas-Marcos, conocedora y estudiosa de la ciudad de Tánger, fue la encargada de moderar el acto. Doctora en Literatura y Estética, es también autora galardonada y cuenta con varios títulos, entre ellos Carmen Laforet en Tánger. Quiso abrir la presentación con unas palabras de cariño con el autor Juan Goytisolo, fallecido unos días antes, palabras de pésame y de recuerdo a las que se unió el propio Javier Valenzuela, quién comentó que era un autor irrepetible, el único referente al que había conocido personalmente. «Fue él quien me enseñó a pensar».
Rocío destacó que Javier Valenzuela nació en Granada pero se siente tangerino porque Tánger es una ciudad que te adopta, te acoge y fagocita a todo aquel que se adentra en sus calles. La ciudad, señaló la autora, es un protagonista más, como también lo fue en Tangerina, que aporta originalidad a esta novela negra que obviamente cuenta con sus asesinatos. «El modo en el que Javier se acerca a la ciudad de Tánger es un modo Goytisoliano, mostrando una Tánger normal, casi vulgar, lo que demuestra lo integrado que está en la ciudad». Al respecto, Javier mencionó que Tánger es una ciudad en la que se han escrito dos de las grandes obras capitales del siglo XX en lengua española.
Siendo periodista se profesión con una larguísima trayectoria, la moderadora apuntó que Javier no pierde su muñeca de periodista en esta novela. Entre sus páginas podemos encontrar auténticas crónicas con las que contar la verdad sin tener que citar las fuentes. Entre risas, el autor mencionó que si Truman Capote usó las técnicas novelísticas para hacer periodismo en A sangre fría nada le impide a un periodista usar las técnicas periodísticas para escribir novelas. «Yo siempre reivindico que mi técnica narrativa es una técnica periodística, algo totalmente legítimo aunque la novela sea ficción».
Sobre los personajes de la novela, Rocío mencionó que su favorito era Messi. «Creo que representa el espíritu de toda una generación de marroquíes completos; un hombre con ganas, con hambre, listo y que sabe moverse. Algo que el autor lo refleja muy bien».
Pero también señaló que entre las páginas de esta novela podemos encontrar personajes reales. Juan Goytisolo asoma momentáneamente y la propia Rocío también hace un cameo. Sobre los personajes reales, Javier Valenzuela confesó que es algo que también conlleva sus riesgos. «Nunca sabes si tus amigos van a estar contentos por cómo los dibujas en los libros».
Y tras casi hora y media de presentación, se dio paso al turno de preguntas con la intervención de varios asistentes. En realidad, no se habló mucho del argumento de la novela, que supone una segunda entrega de lo que será una trilogía. Se destacó y se habló mucho de la ciudad de Tánger y el autor se explayó contando múltiples anécdotas en las que salieron a relucir algunos amigos que amaban y aman profundamente la ciudad de Tánger, amigos españoles pero también amigos marroquíes de ahí que ellos sean personajes importantes en sus obras.
Realmente fue un encuentro muy divertido en el que no faltaron las risas y el buen ambiente.
Javier Valenzuela (Granada, 1954) comenzó a ejercer el periodismo en la revista Ajoblanco y trabajó durante 30 años en el diario El País, donde fue corresponsal en Beirut, Rabat, París y Washington, y director adjunto.
En 2013 fundó el mensual tintalibre. Entre sus obras anteriores figuran la novela Tangerina (2015) y la antología de reportajes Crónicas quinquis (2013). Limones negros es su undécimo libro y segunda novela.
Tánger, otoño de 2015. La corrupción española atraviesa el Estrecho en busca de nuevas oportunidades. Lola Martín, capitana de la Guardia Civil, sigue la pista en la ciudad marroquí de los tejemanejes de Arturo Biescas, presidente de BankMadrid. Sepúlveda, profesor del Instituto Cervantes, le ayuda en sus pesquisas.
¿Hasta dónde puede soportarse la corrupción? ¿Es lícito tomarse la justicia por su mano cuando la vía oficial resulta inoperante? Sepúlveda y Lola Martín se hacen esas preguntas conforme van apareciendo cadáveres y entra en escena Adriana Vázquez, la femme fatale de Tánger.
Buenaas>! Buena crónica, siempre he pensado que me encantaría ir a cualquier encuentro con autores de sus libros ya que nos expresan mejor su objetivo al escribir y el tema a tratar en el libro ^^
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¡Gracias por la crónica!
ResponderEliminarGracias por la presentación. Un beso.
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