Autora
Elisabet Benavent (Valencia, 1984) es licenciada en Comunicación Audiovisual por la Universidad Cardenal Herrera CEU de Valencia y máster en Comunicación y Arte por la Universidad Complutense de Madrid. Ha trabajado en el Departamento de Comunicación de una multinacional. Su pasión es la escritura. La publicación de sus novelas En los zapatos de Valeria, Valeria en el espejo, Valeria en blanco y negro, Valeria al desnudo, Persiguiendo a Silvia, Encontrando a Silvia, Alguien que no soy yo, Alguien como tú y Alguien como yo se ha convertido en un éxito total de crítica y ventas. En la actualidad colabora en la revista Cuore, se ocupa de la familia Coqueta y está inmersa en la escritura.
Sinopsis
Este es el diario que Lola pudo haber escrito o imaginado de aquel tiempo vivido en compañía de Valeria, Carmen y Nerea, y aquí se recoge lo que sintieron cada una de ellas, lo que vivieron, en qué se equivocaron, sus recuerdos más íntimos, la lista de cosas que les gustaría hacer, de los regalos para sorprender, de los lugares que recorrieron o de las frases que quedaron dichas en los libros. Este es un homenaje a todo el universo Valeria imprescindible para Coquetas.
Hace unos tres años, Elisabet Benavent era una chica más, con su familia, su trabajo, sus amigas y su vida normal y corriente. Un día la suerte se cruzó en su camino, convirtió su pasión en su modo de vida y hoy es conocida por muchísimos lectores pues en los dos últimos años ha publicado un total de diez libros. ¿Quién no conoce la saga Valeria? ¿O a Silvia? ¿O a esos ositos juguetones que nos miran desde la cubierta de sus libros?
La conocí con la salida a mercado de la segunda entrega de Valeria y hace unos días nos vimos de nuevo para hablar de su última publicación, El diario de Lola, un libro peculiar, diferente a lo que había hecho hasta ahora pero muy original pues se trata de un diario en el que el lector no solamente se va a reencontrar con Valeria y sus amigas sino que también va a poder hacer uso del mismo para sus propias reflexiones y anotaciones. Esto es lo que nos contó.
Elisabet Benavent (Valencia, 1984) es licenciada en Comunicación Audiovisual por la Universidad Cardenal Herrera CEU de Valencia y máster en Comunicación y Arte por la Universidad Complutense de Madrid. Ha trabajado en el Departamento de Comunicación de una multinacional. Su pasión es la escritura. La publicación de sus novelas En los zapatos de Valeria, Valeria en el espejo, Valeria en blanco y negro, Valeria al desnudo, Persiguiendo a Silvia, Encontrando a Silvia, Alguien que no soy yo, Alguien como tú y Alguien como yo se ha convertido en un éxito total de crítica y ventas. En la actualidad colabora en la revista Cuore, se ocupa de la familia Coqueta y está inmersa en la escritura.
Sinopsis
¿Recuerdas cuando tuviste entre las manos el primer ejemplar de En los zapatos de Valeria?
¿Recuerdas lo que sentiste?
Este es el diario que Lola pudo haber escrito o imaginado de aquel tiempo vivido en compañía de Valeria, Carmen y Nerea, y aquí se recoge lo que sintieron cada una de ellas, lo que vivieron, en qué se equivocaron, sus recuerdos más íntimos, la lista de cosas que les gustaría hacer, de los regalos para sorprender, de los lugares que recorrieron o de las frases que quedaron dichas en los libros. Este es un homenaje a todo el universo Valeria imprescindible para Coquetas.
La conocí con la salida a mercado de la segunda entrega de Valeria y hace unos días nos vimos de nuevo para hablar de su última publicación, El diario de Lola, un libro peculiar, diferente a lo que había hecho hasta ahora pero muy original pues se trata de un diario en el que el lector no solamente se va a reencontrar con Valeria y sus amigas sino que también va a poder hacer uso del mismo para sus propias reflexiones y anotaciones. Esto es lo que nos contó.
Marisa G.- Elisabet nos vimos hace ahora justo dos años. Desde entonces he seguido tu trayectoria. Me leí toda la saga Valeria, me faltan las otras dos, pero que en dos años hayas publicado diez libros... ¿Tú tienes que tener las teclas del ordenador totalmente gastadas?
Elisabet B.- (Risas) Han sido dos años bastante intensos. Gracias a Dios tenía material hecho y Silvia, que vino después de Valeria, estaba a punto de ponerle el final. Pero sí, han sido dos años en los que he aprendido a dormir poco.
M.G.- A dormir nada porque para publicar tanto, ya mirás.
E.B.- Sí, exacto, más bien a dormir nada pero bueno me he acostumbrado.
M.G.- Bueno y tu vida, imagino que habrá cambiado mucho desde entonces, ¿no?
E.B.- En lo laboral mucho. Yo trabajaba en una oficina y en octubre del año pasado tuve que tomar una decisión porque empezaba a sentir que no podía coger todos los proyectos que me gustaban por me falta de tiempo, así que pensé que era el momento de lanzarse a la piscina, de probar suerte. Salga como salga creo que voy a aprender con la experiencia. Nunca sabemos donde estaremos mañana y hay que aprovechar lo que surja. Creo que era el momento de arriesgarse y así he estado un año trabajando en casa, con nuevos proyectos y demás. Estoy muy contenta.
M.G.- Siempre lo digo, los autores que os arriesgáis a dejar el trabajo sois unos valientes.
E.B.- Me costó muchísimo tomar la decisión. Fue una cosa muy consensuada, lo hablé con mi familia, con mi marido,... pero todo el mundo estaba de acuerdo en que hay un momento para arriesgarse. Tenía 30 años, no tengo hijos... Era el momento. Y de lo que salga, aprenderé. Eso seguro.
M.G.- La vida es de los valientes, sin duda.
E.B.- Eso dice mi madre que de cobardes nunca se ha escrito nada.
M.G.- Ahora que me comentas este riesgo que has asumido, recuerdo que no hace mucho otra escritora, una madre de familia, también me decía que había dejado su trabajo para dedicarse en exclusiva a la escritura. ¿Significa esto que el mercado editorial se está recuperando? ¿Apostáis más fuerte porque veis una recuperación?
E.B.- A mí me da la sensación de que el mercado editorial está mejor. Creo que hay mucho público lector, aunque la crisis afecta al mercado editorial como afecta a cualquier otro sector y además en este caso tiene que hacer frente a la piratería con todo el daño que eso hace. Pero hay mucho público lector que empieza a moverse. Quiero creer que todo irá a mejor, que se buscarán soluciones como por ejemplo las ediciones en bolsillo que están muy bien de precio.
M.G.- Es que yo siempre pienso que los que os dedicáis a escribir ponéis mucho esfuerzo en lo que hacéis y encima os lleváis una mínima parte por cada libro vendido. Si encima la crisis se come el mercado, dime tú.
E.B.- El trabajo que implica sacar una novela es una inversión de tiempo muy grande porque tienes un momento de documentación, de desarrollo, de corrección,... Y es verdad que el autor no se lleva el precio del libro pero cuando entras en este mundo te das cuenta de la cantidad de personas que están participando en cada proyecto y empiezas a entender un poco, pero sí que es verdad que es un mundo complicado, pero ¿y cuál no lo es?
M.G.- Pues sí. Bueno y ahora vienes con El diario de Lola que no es una novela al uso sino algo totalmente diferente. Imagino que con este libro intentas hacernos recordar aquellos diarios que casi todas hemos tenido de jovencitas, ¿no?
E.B.- Sí porque tener un diario es una cosa como muy sana, casi terapéutica. Eso de poner por escrito lo que te ocurre es muy bueno. Además es como compartir todo lo que aprendieron las chicas de la saga Valeria a través de esos cuatros libros. Sus aprendizajes, sus errores, sus sueños,... son como reflexiones que a su vez invitan a la lectora a reflexionar. Este libro es como un rinconcito para hacerse un mimo a una misma. Aquel diario que teníamos era sanísimo y además creo que relaja muchísimo sentarse a pensar contigo misma.
M.G.- ¿Pero esta idea ya surcaba por tu cabeza cuando estabas escribiendo la saga o nace de otro modo?
E.B.- Vino después con el feedback de las lectoras. Se ponían en contacto con la editorial o conmigo a través de las redes sociales y todas decían que les encantaría tener la agenda roja que usaba Lola en la saga. Aquello nos hizo pensar. ¿Por qué querían tener la agenda? ¿Por el contenido? ¿Por lo que significa? Estuvimos dándole muchas vueltas y al final pensamos que una agenda tampoco era un valor añadido porque hay agendas preciosas en el mercado, pero queríamos hacer una cosa especial en la que participaran las lectoras. Así que la idea partió de ellas.
M.G.- Esto es totalmente interactivo porque aquí puedes escribir tus planes, pensamientos y todo lo que se te ocurra. Además tengo que decirte que la edición es preciosa.
E.B.- Me encanta que me digas eso.
E.B.- Es que ha hecho un trabajo espectacular e impecable. Yo estoy muy contenta con el resultado porque ella es una artista. Sobre todo esas ilustraciones que acompañan las secciones de cine y de música me parecen buenísimas.
M.G.- Es un libro muy divertido, ameno, agradable a la vista. Se disfruta mucho.
E.B.- Muchas gracias. Esa era la intención. Queríamos que fuera interactivo y que a la gente le apeteciera participar y rellenar todas esas páginas en blanco.
M.G.- Y hablando de las chicas... Lola es un personaje muy fuerte en la saga. No sé si de las tres amigas de Valeria, ¿crees que es la que más hondo ha calado entre las lectoras?
E.B.- Creo que sí. Muchas se sienten identificadas con Carmen, con su serenidad, con esa amiga a la que todo el mundo va a pedir consejo, o con Nerea, con esa contención, ese sí pero no,... o con Valeria y sus dudas. Pero casi todas dicen lo mismo, que quieren ser Lola o quieren ser como Lola. ¡Y yo también quiero ser Lola, desde luego!
M.G.- Es la que más disfruta y la menos se complica la vida por otra parte.
E.B.- Sí pero porque es super honesta consigo misma y va por lo que quiere sin tapadera, ni prejuicios. Creo que eso es muy sano. De ahí que sea ella la que lleva un poco de la mano a la lectora a través de este diario porque para rebuscar dentro de nosotras mismas hay que hacerlo con esa honestidad que tiene ella.
M.G.- El libro se estructura en varios bloques. Los cuatro primeros corresponden a las cuatro chicas, cada una vinculada a una estación. ¿Por qué el libro empieza en primavera? ¿No sería más lógico que en las fechas en las que estamos, se iniciara con el invierno?
E.B.- Es que la primavera tenía que ser Valeria y además tenía que empezar con Valeria sí o sí. No podía ser de otra manera. Esto fue algo que se comentó mucho en la editorial cuando lo estábamos estructurando. Date cuenta de que esto no es una agenda, por lo tanto teníamos la libertad de empezar por donde consideráramos y pensamos que ese personaje que fue el hilo conductor de toda la saga Valeria, la que le da nombre, tenía que ser la primera en aparecer y además representando a la primavera porque ella es tan naif, tan natural,... Tenía que ser así.
M.G.- Lola es el verano, no podía ser de otro modo. Carmen el otoño. Nerea el invierno. Son conexiones bastante acertadas.
E.B.- Sí. Lola tenía que ser el verano con el calor, la asocias con las vacaciones, con la diversión, las juergas,... El otoño, esa época tan serena, le venía muy bien a Carmen y claro Nerea la fría, tenía que ser el invierno. No cabía otra.
Creo que la idea la dio la propia Montse Martín. Me pareció fantástico todo lo que propuso. Fue una gozada trabajar con ella porque enseguida se lanzó a la lectura de la saga y fue cogiendo ideas. Fue increíble.
M.G.- ¿Y cuánto tiempo se ha tardado en preparar este libro?
E.B.- Fue un trabajo muy intenso. La idea salió de una comida con mi editor, nos venimos arriba, fuimos a la editorial, reunimos al equipo y ese mismo día llamamos a Montse para ver si le apetecía el proyecto. Inmediatamente me fui a Barcelona a conocerla. Fueron dos meses de trabajo super intensos, de generar contenidos, mandárselo a Montse, que ella fuera generando las ilustraciones, montar el contenido... Porque además íbamos justos de timing de cara al planning. Creo que esa intensidad de esos dos meses metidos en el proyecto lo han hecho mucho más sentido. Yo desde luego ahora lo releeo y me acuerdo de esas sensaciones vertiginosas, de ese trabajo tan intenso, de ese volver a reencontrarte con Valeria...
E.B.- A mi este tren me da vida. Siempre me digo al terminar un proyecto que me voy a coger unas vacaciones solo para leer, una semana en casa para leer y tomar café, pero luego no lo hago porque cuando termino algo estoy con la angustia del ¿y ahora qué? A mi me gusta siempre tener cosas aunque también me agobia tener muchas pendientes pero me da vida todo este movimiento.
M.G.- Y lo de trabajar desde casa, ¿cómo se lleva? Porque cuando trabajabas en la oficina tenías contacto con tus compañeros pero ahora desde casa estarás experimentado mucho esa soledad del escritor.
E.B.- Sí, es inquietante. Echo mucho de menos el trabajo en la oficina por la rutina, porque tienes una hora de entrada y de salida, tienes tu hora programada de comer, y tienes todos los procesos interiorizados pero en casa tienes que tener una mano férrea para no dispersarse.
En principio me dije que todos los días me iba a levantar, me iba a tomar un café con mi marido cuando se fuera a trabajar, me iba a duchar y me iba a vestir de persona. Pues no.
M.G.- Todo el día con el pijama, ¿no? (Risas).
E.B.- Bueno sí, pero tengo un apartado de pijamas que solo utilizo para trabajar (Risas). El otro día mi marido me contó diecisiete pijamas. Le respondí que eran herramientas de trabajo.
M.G.- (Risas) ¡Qué gracia!
E.B.- Sí, porque hay algunos que no los utilizo para dormir. Me cambio de uno a otro como si fuera ropa para salir a la calle. Tiendes a querer estar más cómoda. Y otra cosa que me daba miedo era encender la tele y quedarme las horas colgadas mirándola, pero en eso no he caído. Como tengo cosas que hacer, me organizo bastante bien. Hay veces que me tengo que obligar a quitar el ordenador de encima de la mesa cuando estoy comiendo porque tiendes a seguir haciendo cosas. Vas con la inercia y continúas incluso cuando comes.
El mayor problema de trabajar en casa es que no tienes hora de inicio pero tampoco lo tienes de final de jornada. Entonces la cosa se puede alargar hasta las tantas.
M.G.- Bueno, y hemos hablado antes de la estructura de la novela y leyendo la sección de Nerea me encontré con unas recetas de esos batidos o zumos tan famosos, los detox. Esto es algo que me llama la atención. ¿Me gustaría saber si los que aparecen en el libro los has probado?
E.B.- Los he probado todos. Debo admitir que serán muy sanos pero algunos saben bastante raros. Pero también te digo que hay uno que lleva aguacate y kiwi que sabe bastante bien. Y el de leche de arroz, fresas, plátano y galletas integrales está pero buenísimo. Hay algunos que cuestan un pelín. Yo lo hago en casa con leche de soja o de arroz y están bien.
A Nerea estos batidos le pegaban muchísimo.
M.G.- Las anteriores novelas las publicaste con Suma de Letras y esta se edita por Aguilar. Es verdad que es del mismo grupo editorial pero ¿a qué se debe el cambio de sello?
E.B.- Es que Aguilar es el sello de no ficción dentro de la casa y este libro está ahí entre la no ficción, la ficción,...
M.G.- Claro, porque, ¿cómo se cataloga este libro?
E.B.- Está a caballo entre una cosa y la otra. Yo siempre digo que es mi primer tanteo con la no ficción. Es una cosa que me llama mucho la atención porque también tengo un blog y me apetece también hacer como una especie de compendio de posts y demás sobre el life styling que está ahora tan de moda, en plan coqueto pero muy divertido. Este libro es un no ficción pero escrito por Valeria que es ficción. Y por eso se ha editado con Aguilar, que al fin y al cabo es lo mismo porque mis editores en Suma son también editores de Aguilar.
M.G.- Entonces has trabajado con las mismas personas.
E.B.- Sí
M.G.- Ahora que has mencionado el blog, te diré que lo he estado leyendo. Ahí vuelcas todas tus reflexiones incluso te atreves a contar tus viajes o escapadas. Es un poco como tener un diario pero en este caso se pierde la intimidad.
E.B.- Pues sí. Mis amigas incluso me recriminan que cuente ciertas cosas pero como no pongo los nombres... Creo que ahora estamos en la época del exhibicionismo. Las redes sociales nos empujan a hacer reflexiones pero públicas y hay cosas muy interesantes y otras muy peligrosas. Tiene que haber un punto intermedio para todo. De todos modos, ciertas reflexiones personales las hemos tenido todos y creo que compartirlas nos ayuda a normalizar ciertas cosas.
Lo de los viajes, bueno no los he compartido todos porque algunos son demasiado personales pero el resto, sí lo vives con intensidad es bueno compartirlo.
M.G.- Este libro lleva en el mercado desde el 22 de octubre, me gustaría saber cómo es el feedback que has recibido de los lectores.
E.B.- Nos ha sorprendido muchísimo. Como es un cosa un poco rara no sabíamos cómo iba la gente a reaccionar pero la verdad es que llevamos tres ediciones y estamos alucinados con la buena acogida y con la disposición de los lectores a participar. Muy contenta.
M.G.- Y creo que tienes un proyecto para enero, ¿verdad?
E.B.- Sí, ese ya está a punto... Llevo en el bolso el ipad con las galeradas del segundo porque lo tengo que entregar esta semana.
M.G.- ¿Se publican dos en enero?
E.B.- No, uno en enero y el otro en febrero. Tres semanas de diferencia entre uno y otro.
M.G.- ¿Y qué nos puedes adelantar?
E.B.- Pues que está ambientado en el mundo de la alta cocina, en un restaurante con una estrella Michelín. Es un tema que siempre me ha llamado mucho la atención. Además tuve la oportunidad de estar un día en la cocina del restaurante ABaC de Jordi Cruz. Fue una experiencia increíble verlo todo desde dentro. Cuando te embarcas en un proyecto así te das cuenta de que no sabes absolutamente nada de cocina y eso que yo pensaba que era una cocinillas pero no. He tenido que admitir que no sé nada de cocina.
Me he divertido mucho con este proyecto, que lo había dejado aparcado cuando inicié la última trilogía...
M.G.- Ah, ¿pero viene de antes?
E.B.- Sí, ha sido un proyecto de dieciocho meses de construcción de personajes que no terminaba de encajar, lo dejé, me metí en la trilogía, luego me volví a meter en este proyecto, localicé dónde estaba el problema, cambié un personaje desde el principio al final y comenzó a funcionar.... Me metí tanto en la historia que ahora estoy viviendo mi propio proceso de duelo, una cosa muy friki, lo sé, pero creo que ese tiempo de escribir, revisar con tranquilidad y demás me ha hecho disfrutar mucho de estas páginas. Además te diré que son muy largos. Tiene seiscientas ochenta páginas el primero y seiscientas noventa el segundo.
M.G.- Bueno pero tú, ¿cuántas horas escribes al día?
E.B.- Depende el día pero a veces entre doce o catorce horas. Son jornadas...
M.G.- Maratonianas.
E.B.- Sí, para el cierre del proyecto de Martina me llegué como dos semanas trabajando unas quince horas al día.
M.G.- Martina es la protagonista del que veremos en enero, ¿no?
E.B.- Sí. A la bilogía se la ha llamado El horizonte Martina. El primero se titulará Martina con vistas al mar.
M.G.- Qué bonito. Pues Elisabet, yo con este libro me lo he pasado muy bien. Es un libro muy ameno y me ha encantado volverme a reencontrar con las chicas. Me lo pasé muy bien leyendo aquella saga la verdad.
E.B.- Muchas gracias. Me hace mucha ilusión que me digas eso porque al final el propósito es entretener. Está muy bien leer cosas sesudas pero de vez en cuando es necesario leer algo con lo que echarse unas risas.
M.G.- Estoy totalmente de acuerdo. Pues lo dejamos aquí Elisabet. Te deseo mucha suerte, que El diario de Lola funcione realmente bien y espero volver a verte con Martina.
Estupenda entrevista. La edición del libro es muy chula
ResponderEliminarMenuda entrevista te has marcado, Marisa !
ResponderEliminarMe ha encantado la entrevista, enhorabuena a ambas !
ResponderEliminarLo cierto es que Elisabet es una pasada: buena escritora, simpática, natural y accesible...
No me canso de contar mi "anécdota" personal con Elisabet: me puse en contacto via mail con ella porque quería darle una sorpresa a mi compañera de trabajo que, al igual que yo, es una gran admiradora suya. Por la distancia, me era imposible conseguir un libro dedicado de su puño y letra así que le envié un ejemplar por correo y Elisabet se lo dedicó personalmente y me lo reenvió por mensajería a nuestro trabajo... La cara de mi compañera (y sus lágrimas) cuando vio el paquete y el libro dedicado, era un poema...Elisabet no dudó en gastar parte de su tiempo libre para hacer feliz a una persona anónima y eso me llegó al alma.
Besos !!
Pues tenéis mérito las dos. Tú por buena amiga y ella por buena persona-autora. Gracias por compartir tu anécdota. Un beso.
EliminarGracias por traernos la entrevista, besotes
ResponderEliminarAún no me he estrenado con la escritora, aunque menos este último, tengo todos en Kindle. ME encanta conocerlos ma´s de cerca, ya lo sabes.
ResponderEliminarLa verdad que admiro a la gente que deja su trabajo para dedicarse únicamente a escribir, olé! Yo no podría, no tengo ese arrojo.
Besotessss
¡Hola! Me encanta... Desde que descubrí el primer libro de Valería, estoy totalmente enganchada a esta escritora y he leído todo lo que ha escrito. Además, todos los libros los tengo en papel, creando un espacio solo para ellos.
ResponderEliminarHe pedido para reyes el diario de Lola, y estoy deseando leer el de Martina.
Me han gustado mucho las preguntas planteadas y sus respuestas. ¡Gracias!
1beso
Que buena entrevista, hasta ahora he leído todo lo que ha publicado Elisabet, me encanta como escribe, y supongo que en persona es tan simpática y divertida como parece. Estoy deseando que publique su nuevo trabajo, será un exitazo como los otros.
ResponderEliminarUn beso,
Madre mía. Cada vez me sorprendes con entrevistas más sorprendentes, valga la redundancia. jejej. Besos.
ResponderEliminarEl libro no es para mí pero me encanta la actitud de esta autora. Esa disciplina, esa valentía y luego eese tono tan distendido y agradable, alguien que sabe lo que tiene entre manos ;) Besos.
ResponderEliminarLa entrevista es buena pero a mi no me llena
ResponderEliminarComo siempre, una entrevista de lo más completa e interesante
ResponderEliminarSin duda, hay que ser valiente para dejar el trabajo para dedicarse a la literatura, me alegra que le haya salido bien la jugada
Besos