Editorial: Grijalbo.
Fecha publicación: junio, 2015.
Nº Páginas: 256.
Precio: 16,90 €
Género: Narrativa.
Género: Narrativa.
Edición: Tapa blanda con solapas
ISBN: 9788425353338
[Disponible en ebook;
puedes leer primer capitulo aquí]
ISBN: 9788425353338
[Disponible en ebook;
puedes leer primer capitulo aquí]
Autor
Romain
Puértolas, de origen franco-español, nació en 1975 en Montpellier.
Transportado por los caprichos del destino a España e Inglaterra, ha
sido DJ, profesor de idiomas, traductor-intérprete, auxiliar y
coordinador de vuelo en el aeropuerto de El Prat de Barcelona, empleado
de Anea en Madrid y limpiador de tragaperras en Brighton.
De
regreso a Francia, trabajó durante cuatro años como inspector de
policía en un servicio especializado en el desmantelamiento de redes de
inmigración ilegal.
Adicto
a la escritura compulsiva sobre postits, Puértolas debutó en el mundo
literario con El increíble viaje del faquir que se quedó atrapado en un
armario de Ikea (Grijalbo, 2014). Antes de su exitoso lanzamiento en
Francia, la novela ya había conquistado a más de cuarenta editoriales
extranjeras convirtiéndose en un fenómeno mundial conocido como «faquirmanía».
En
la actualidad, Puértolas reside en Málaga y se dedica en exclusiva a la
escritura. La niña que se tragó una nube tan grande como la torre
Eiffel es su nueva novela, una historia tan desenfada y llena de humor
como la anterior, aunque más emotiva todavía, y que ya se ha convertido
en un éxito de crítica y ventas en su país.
www.romainpuertolas.com
Sinopsis
Una cartera parisina necesita viajar a Marrakech para llevarse de allí a su hija adoptiva, muy enferma. Pero, cuando Providence Dupois está a punto de partir, un volcóna islandés despierta y paraliza el tráfico aéreo europeo. Desesperada por reencontrarse con la niña, la joven madre entiende que tan solo le queda una opción: echar a volar.
Un joven enamoradizo ayudará a Providence a emprender este viaje tan extraordinario, a lo largo del que conocerá a personajes tan variopintos como un chino que habla como un pirata y unos monjes tibetanos que escuchan a Julio Iglesias. Y es que el amor de una madre es tan fuerte como para despegar hacia las nubes.
Una fábula del siglo XXI que desprende emotividad y ternura. Un novela mágica aderezada con humor que seducirá a todos los corazones.
La original historia de una madre que aprendiól a volar por amor y que nos enseña que nada, absolutamente nada, es imposible.
[Biografía y sinopsis tomadas directamente del ejemplar]
Un faquir se queda encerrado en un armario de Ikea y emprende en su interior un viaje impresionante. Una niña se traga una nube tan grande como uno de los monumentos más famosos del mundo mientras su madre vuela por sí sola ataviada únicamente con un bañador. ¿Hechos insólitos? En las novelas de Romain Puértolas no y por lo tanto el lector tiene que estar predispuesto a cualquier cosa porque, por difícil, complicada y rocambolesca que parezca, en los libros de este autor franco-español todo es posible. Así funciona la magia, y así debería ser la vida, llena de fantasía para que los malos tragos sean más digeribles.
Romain Puértolas nos hizo pasar un rato tremendamente divertido con la novela anterior en la que un faquir pretendía comprar una cama de clavos en Ikea y ahora llega con otra maravillosa aventura en la que encontraremos personajes increíbles y llenos de ternura porque eso es La niña... una novela cargada de ternura, fantasía, humor y mucha realidad.
Si alguien nos viene y nos dice que quiere aprender a volar por sus propios medios, únicamente batiendo sus brazos, pensaríamos que es un enfermo que se ha escapado del manicomio, pero a veces los locos tienen más razón que un cuerdo y por suerte hay mucha gente que cree en ellos.
Providence Dupois es una joven cartera parisina, de treinta y cinco años, hermosa, bella, con seis dedos en su pie derecho, que transita en su 4 latas amarillo de un lado a otro repartiendo cartas y que tiene un sueño: reunirse con su hija adoptiva Zahera, ingresada en un hospital de Marrakech desde su nacimiento, momento en el que perdió a su madre biológica. La pequeña padece una enfermedad que requiere de cuidados especializados y por eso Providence pretende trasladar a la niña hasta Francia donde podrá ser atendida por personal más cualificado y con mejores medios a su alcance. Por desgracia, a veces el mundo se pone en nuestra contra y cuando menos lo necesitamos, más dificultades encontramos. El día que todo está dispuesto para el viaje a Marrakech, un volcán islandés de nombre impronunciable decide despertar de su letargo y contaminar el espacio aéreo con una nube de cenizas. ¿No podía haber esperado a otro momento? Los aviones se quedan en tierra. No hay vuelos disponibles pero Providence ha hecho una promesa, llegar ese día a Marrakech antes de que salga la luna. Tiene que cumplir su promesa «aunque tenga que aprender a volar para ir a buscarte» [pág. 31]. Comienza así un periplo en el que la joven tendrá que afrontar diversas situaciones estrambóticas y se topará con personajes extraños como un senegalés que se hace pasar por un maestro chino, unos monjes tibetanos que oyen a Julio Iglesias, y un controlador aéreo que creerá en su sueño.
Pero ¿es este el verdadero argumento de la novela? O mejor dicho, ¿es esta la única historia? Yo os lo diré. No. En La niña... se desarrolla la historia de Providence y Zahera que para mí no es más que una excusa para contar otra más dramática, más dolorosa, más tensa,... Porque un dolor se esconde en el pecho de otro personaje y amenaza con ulcerarse. En cierto sentido La niña... es como ese cuento que algunos padres cuentan a sus hijos para hacerles saber una terrible verdad. Es una fábula llena de amor, ternura, esperanza,... que nos recordará de vez en cuando que más allá de la historia de Providence y Zahera hay otro mundo, otra verdad, otros personajes y por eso el autor nos ayuda a volver al presente de la novela para no olvidar la realidad.
Lector, en ocasiones te parecerá que lo que estás leyendo peca de demasiada fantasía, sobre todo si no eres adepto al género, pero llegarás a un final que pondrá todos los puntos sobre las ies y entenderás que el camino ha merecido la pena, como la merece el amor envolvente. En La niña... habrá mucho amor, ese amor incondicional de una madre por sus hijos, esa locura que se apodera de esas mujeres capaces de saltar todo tipo de obstáculos por imposibles que parezcan, mujeres que lo dan absolutamente todo por sus hijos. Y también habrá el amor de un hombre a una mujer, ese que también peca de locura a veces, pasional, férreo, que no entiende de trabas ni cortapisas... La niña... es una mezcla de emociones, desde el dolor que el autor intenta dulcificar con nubes de algodón, pasando por la ternura, la esperanza, el amor y la risa. Porque también habrá humor, signo característico del autor y la persona, con diálogos que en ocasiones recuerdan a los hermanos Marx. No obstante, creo que en esta ocasión el humor se diluye un poco en favor de una trama con mayor carga dramática.
Romain Puértolas se caracteriza por construir personajes entrañables, tan humanos, tan naturales. Providence es una mujer que encuentra en Zahera el sentido de su vida, una mujer crédula y soñadora que hará lo imposible por llevar a cabo su sueño. Metafóricamente bien podría representar todas esas mujeres que se sacrifican, que emprenden proyectos disparatados por alcanzar el bien de su prole. Y Zahera es una niña que, a su corta edad y con las limitaciones de su enfermedad, nos imparte auténticas lecciones de vida. A mí la pequeña me ha conmovido enormemente pero también me ha hecho soñar.
La niña... no es una novela para leer con los ojos del raciocinio. Hay que rescatar el niño o la niña que un día fuimos, que leía libros en los que los animales hablaban, vestían camiseta y pantalón, construían casas... Hay que volver a la magia y a la fantasía pero sin olvidarnos de la realidad que sigue estando ahí. En esta novela hay mucha realidad, dura y complicada, y por eso mejor teñirla con los colores del arco iris.
La niña que se tragó una nube tan grande como la torre Eiffel. Cuatro partes. Capítulos de breve extensión. 249 páginas. Providence y Zahera. Dos historias. Realidad y fantasía. Emoción, ternura, amor y sueños. Una novela con un final tremendo que me cogió desprevenida y que justificó con creces todo lo que había leído anteriormente.
Si un día perdiste la inocencia de tu niñez y dejaste de creer, este es un buen libro para recuperarla.
[Ilustraciones e imágenes tomadas de Google]
Retos:
- Sumando 2015.
- 100 libros.
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A mí este libro solo con el título ya me habría ganado pero con las opiniones que voy viendo estoy deseando hacerme con él
ResponderEliminarBesos
Pues se agradece esta buena reseña y la entrevista al autor porque las novelas de Romain Puértolas tienen títulos maravillosos y portadas estupendas pero, claro, eso no lo es todo, y los posibles lectores dudamos. Tengo ganas de estrenarme con este autor. Bss
ResponderEliminarQué novela con más buena pinta. Cada vez me apetece más leerla. A ver si me toca en algún sorteo!!!
ResponderEliminarUn beso.
Ya está en mi lista de pendientes, a ver cuando me hago con el. Un besote
ResponderEliminarNo me veo leyendo esta novela, aunque se ve que disfrutaste con su lectura. Besos.
ResponderEliminarLo tengo pendiente de leer, espero que en verano caiga!
ResponderEliminarBesos
Leí la reseña de Pedro (el búho) y también es muy positiva, al igual que la tuya. Pero no sé qué tiene el libro que no me termina de llamar la atención. No sé si es el género, o que no estoy receptiva a tanta imaginación como veo que le pone el autor a sus obras.
ResponderEliminarCreo que de momento lo dejo pasar.
Un saludo.
Este autor no me acababa de convencer y lo del ikea me pareció como gancho y no me decidí pero aun cuando la entrevista ya me hizo dudar seguía con reservas pero tu reseña es demoledora. Me da miedo lo del humor y le eché ayer un ojo en la librería y no escogí un párrafo muy adecuado por lo que veo ya que el libro da para mucho. La última frase de la reseña es para que la guardes y la enmarques. Es más, deberían ponerla en una de esas fajas que llevan los libros. Encima me nombras a los Marx, tú sí que sabes.
ResponderEliminarBesos
Norah, adoro tus comentarios. Cuando te sientes atraída por un libro, cuando no, cuando dudas, tan solo por lo que te cuento de ellos. Te diré que de todos los de este mundo, a quien más me dolería decepcionar con mis opiniones es a ti. Tu sinceridad me gana siempre y creo que sinceridad con sinceridad se paga. Romain juega a poner feliz locura en los momentos más delicados de la vida. Creo que esa es su impronta, especialmente en este libro, que como digo, lleva más carga dramática que el anterior. Él quiere que soñemos, que fantaseemos pero la realidad golpea al llegar al final. No te miento si te digo que ese final me pilló por sorpresa y me impactó. No lo esperaba y fue en ese momento cuando entendí porque Romain había escrito lo que había escrito, por qué esa fantasía tan disparatada. Cada libro es distinto para cada persona e incluso el mismo libro es distinto para la misma persona dependiendo del momento de tu vida en que lo leas. Para acercarse a esta novela tienes que estar predispuesta a soñar y creer que todo es posible. Todo por amor. Un beso.
EliminarMe invitaron a un encuentro con el autor hace unas semanas y por desgracia no pude acudir. El libro me apetece muchísimo, no tenía ninguna duda, pero desde luego si la hubiera tenida con tu reseña se me hubiera disipado.
ResponderEliminarBesos.
Tu reseña desborda emociones allá por dónde la mires Marisa. Yo sí que he sentido ternura con lo que estaba leyendo. No hay mentira en la magia, es otra realidad. Un beso
ResponderEliminarLeí otra reseña sobre el libro antes de la tuya y me quedé medio convencida de que podrría gustarme, pero eso de leer con la imaginación y volver a la infancia, me llama mucho, De hecho todavía tengo curiosidad por su novela anterior, me pareció un planteamiento original yy diferente.
ResponderEliminarUn beso.
La verdad es que es un libro que no me llama la atención este libro.
ResponderEliminarA mí estos títulos tan largos no te creas, me mosquean un poco y me hacen dudar del contenido. Pero debo reconocer que de este me atrae esa mezcla de fantasia y realidad, porque tú misma adviertes del exceso de fantasía, pero parece que en este caso tiene un objetivo que nos lleva (supongo) al lado más real de la historia. Le echaré un vistazo.
ResponderEliminarUn abrazo
A mi con poco ya me sumergen en un mundo de imaginación y si viene de este hombre yo por el vuelo también.
ResponderEliminarPues hace unos días dije que jamás leería este libro, hoy ya creo que sí que lo haré, me parecía efectista, un libro que pedía demasiadas concesiones pero tu lectura me gusta, creo que cambio de opinión, así soy yo jajajaj, como un crío. Besos
ResponderEliminarNo sé qué hacer con este, lo tengo en duda...
ResponderEliminarBesotes
A mí me costó meterme en la historia, pero una vez que lo hice, y con ese final... Me ha encantado.
ResponderEliminarUn beso.