NEFASTA: FIN.

Año: 2012.

Director: Jorge Torregrossa.

Reparto: Maribel Verdú, Daniel Grao, Clara Lago, Blanca Romero, Antonio Garrido, Carmen Ruíz, Miguel Fernández, Andrés Velencoso.

Género: Intriga.

Sinopsis: Un grupo de amigos se reúne para rememorar la noche que vivieron quince años antes en un refugio de montaña. Tras un inesperado apagón, descubren que las estrellan brillan más de lo habitual. A la mañana siguiente, uno de ellos desaparece sin dejar rastro.

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«Fin... - pensó aliviado el espectador al asomar los créditos finales en la pantalla», porque eso es lo único destacable de esta cinta, el alivio que se siente cuando definitivamente acaba.

Basada en la obra homónima de David Monteaguado (me entran ganas de leerla por ver si la novela es tan desastrosa como la película), Fin ha sido llevada al cine por el director Jorge Torregrossa, al que hasta ahora conocíamos por sus cortometrajes o series de televisión como Tierra de Lobos o La Señora. Esta película supone el debut de este director en la gran pantalla y lamentablemente ha sido un debut que deja mucho que desear.

Porque Fin es una tomadura de pelo. Con una base interesante (el fin del mundo, el apocalipsis del que hablan las Escrituras), Torregrossa nos presenta una versión casposa que no hay por donde cogerla. Tenemos un inicio que despierta curiosidad. El reencuentro de un grupo de amigos que no se ven desde hacía veinte años tras un incidente escabroso es un cliché que da mucho juego. Máxime si entre todos esos amigos, falta uno de ellos, Ángel, apodado El profeta, protagonista y víctima del incidente mencionado y del que todos hablan con gran misterio.

Vamos bien. Pero luego comienzan a suceder una serie de extraños acontecimientos y a partir de ahí todo se va al traste, llegando a un final que te deja con dos palmos de narices. Me gusta que las películas y los libros ofrezcan finales abiertos, que quede a la imaginación del espectador/lector el cierre de la historia pero oiga, eso es una cosa y otra muy distinta poner un punto y final cuando debería haber sido un punto y seguido. 

En esta película Torregrossa corta por la tanjente. No hay ninguna explicación, motivo, causa, ni la más mínima justificación asoma y tras noventa minutos  se nos quedan los ojos como platos y la mandíbula desencajada, con ganas de  lanzar un grito desesperado:

¿¿¿Pero que c... (píiiiiiiiiiiiii) ha pasado???

Sabéis que soy defensora del cine español pero es que esto no tiene nombre. El resultado es para depositar directamente en la hoguera inquisitorial.

Se tiende a suplir guiones pésimos con un reparto primoroso, actores y actrices conocidos y destacables. Un gran error porque, bajo mi punto de vista, el mayor peso de una película recae en la trama (atractiva, bien urdida, creíble,...) más que en la interpretación del reparto. Podemos toparnos con unos actores pésimos pero si la historia es buena no nos dejará tan mal sabor de boca.

Cuando hablé de la película Blancanieves dejé claro que la interpretación de Maribel Verdú sobresalía con luz propia. Sin embargo, en esta cinta, ¿dónde ha quedado esa maestría? Cuando un actor tiene trabajos maravillosos y otros penosos, ¿de quién es la culpa? ¿Del director que no da las indicaciones oportunas? ¿Del guión que rezuma agua por todos lados? ¿Del actor que no está en su mejor momento?  Me he planteado mil veces estas preguntas y no consigo encontrar la respuesta correcta. Probablemente sea un compendio de todo. Desde luego Maribel Verdú no se luce en esta cinta.

Claro Lago sigue en su línea y en esta ocasión interpreta a la novia contratada de uno de los amigotes. De todo el elenco, quizás es la más destacable con una serenidad que agrada a la vista.

La actriz Carmen Ruíz interpreta a Sara a la que llaman Madre Teresa por su constante preocupación por los demás. Solo la he visto trabajar en la caja tonta y siempre con papeles un poco bobalicones. En esta cinta, su personaje sigue las mismas pautas e interpreta a un personaje pueril, idealista y un poquito crispante especialmente en las escenas finales de su personaje. 

En cuanto a los demás: Daniel Grau, Antonio Garrido (visto y no visto), Blanca Romero,... no tengo mucho que destacar ni para bien ni para mal. Ninguno de ellos despierta empatía ni convence.

Dejo aparte a Andrés Velencoso. ¿Qué hacemos con él? Viendolo actuar me venía a la cabeza aquella cancioncilla popular que dice: 

Manolete, Manolete,

si no sabes torear, 

pa' que te metes...

Su falta de tablas las suple con gritos y voces. Lo único interesante de su papel es el espectacular cuerpazo en bañador con el que nos deleita (perdón por ser tan frívola pero es lo mejor de toda la película), sin embargo no nació este chico para el séptimo arte.

Así pues, por el pésimo guión, por un misterio descafeinado, por timar al espectador, por su filosofía barata, por unas interpretaciones insulsas, por unos diálogos pobres hasta enfermar, por ofrecer una introducción, un nudo y ningún desenlace,.... no puedo sino darle  a esta película un suspenso en toda regla, confiando en que el próximo largo de Torregrossa sea al menos pasable.

Os dejo con un trailer que promete mucho pero...